La metamorfosis del Barça Publicado 29-01-2015 21:28:00
El Barcelona dio este miércoles un golpe sobre la mesa al eliminar al Atlético de Madrid en la Copa del Rey. Lo hizo en una plaza ultra complicada y poniendo en práctica una fórmula prácticamente nueva en Can Barça: haciendo daño al contragolpe. De un tiempo para acá el conjunto azulgrana ha experimentado una evolución en su juego que le está dando muy buenos resultados. Es la metamorfosis del Barcelona.
Luis Enrique está apostando por un fútbol diferente y el encuentro en el estadio Vicente Calderón es un claro ejemplo. Dos goles al contragolpe y otro más a balón parado noquearon a los chicos de Simeone. El técnico azulgrana da mucha más importancia al juego directo y efectivo que a cuidar la posesión. Y en este aspecto, Messi, Neymar y Luis Suárez hacen maravillas. Los tres futbolistas se entienden a la perfección y son los encargados en muchas ocasiones de liderar las contras del Barcelona. El 1-1 ante el Atleti se vio claro: Messi recupera y cede a Luis Suárez para montar la contra. El uruguayo controla e inmediatamente mete un pase al hueco para la carrera de Neymar. Y el brasileño, solo ante Oblak, no perdona.
Una evolución con cada entrenador:
En un segundo plano queda ya el estilo que instauró Guardiola en su etapa como entrenador del Barcelona. El control absoluto se ha reinvertido para dar paso a un fútbol menos vistoso pero más efectivo. Pep llegó al banquillo del primer equipo en la 2008/09 y con él las posesiones largas. Se mantuvo una línea continuista con la llegada de Tito Vilanova en 2012. Se había creado escuela y desde Can Barça no querían tocar nada de lo que se había hecho hasta el momento con Guardiola.
La dimisión de Vilanova por enfermedad y con el fichaje de Gerardo Martino se empiezan a observar cambio en el estilo. El técnico argentino empieza a dar más prioridad a otros aspectos del juego que a la posesión. Muchos de sus cambios en partidos clave no fueron entendidos y tampoco se compartía su sistema de trabajo.
Y con Luis Enrique llegó el cambio. Antes de la 'era Martino' era muy difícil ver algún gol al contragolpe. Ahora es una de las principales armas para hacer daño al rival. La pausa ha dejado paso a la velocidad. Lo mismo ocurre con las jugadas a balón parado, que también han tomado un papel protagonista. La temporada pasada el Barcelona hizo seis goles a balón parado en Liga, esta campaña ya lleva siete. El Barcelona ha experimentado un cambio que funciona.
Fuente: Marca
Luis Enrique está apostando por un fútbol diferente y el encuentro en el estadio Vicente Calderón es un claro ejemplo. Dos goles al contragolpe y otro más a balón parado noquearon a los chicos de Simeone. El técnico azulgrana da mucha más importancia al juego directo y efectivo que a cuidar la posesión. Y en este aspecto, Messi, Neymar y Luis Suárez hacen maravillas. Los tres futbolistas se entienden a la perfección y son los encargados en muchas ocasiones de liderar las contras del Barcelona. El 1-1 ante el Atleti se vio claro: Messi recupera y cede a Luis Suárez para montar la contra. El uruguayo controla e inmediatamente mete un pase al hueco para la carrera de Neymar. Y el brasileño, solo ante Oblak, no perdona.
Una evolución con cada entrenador:
En un segundo plano queda ya el estilo que instauró Guardiola en su etapa como entrenador del Barcelona. El control absoluto se ha reinvertido para dar paso a un fútbol menos vistoso pero más efectivo. Pep llegó al banquillo del primer equipo en la 2008/09 y con él las posesiones largas. Se mantuvo una línea continuista con la llegada de Tito Vilanova en 2012. Se había creado escuela y desde Can Barça no querían tocar nada de lo que se había hecho hasta el momento con Guardiola.
La dimisión de Vilanova por enfermedad y con el fichaje de Gerardo Martino se empiezan a observar cambio en el estilo. El técnico argentino empieza a dar más prioridad a otros aspectos del juego que a la posesión. Muchos de sus cambios en partidos clave no fueron entendidos y tampoco se compartía su sistema de trabajo.
Y con Luis Enrique llegó el cambio. Antes de la 'era Martino' era muy difícil ver algún gol al contragolpe. Ahora es una de las principales armas para hacer daño al rival. La pausa ha dejado paso a la velocidad. Lo mismo ocurre con las jugadas a balón parado, que también han tomado un papel protagonista. La temporada pasada el Barcelona hizo seis goles a balón parado en Liga, esta campaña ya lleva siete. El Barcelona ha experimentado un cambio que funciona.
Fuente: Marca